La estúpida Reforma Laboral que apasiona al PRIAN
Nota del editor: La Reforma Laboral que impulsan los coordinadores parlamentarios del PRI y del PAN en la cámara de senadores y de diputados, todos ellos con ingresos no sujetos a verificación de más de 10 mil dólares diarios afectará a los empresarios porque baja la capacidad adquisitiva del público consumidor.
La Reforma es todo lo contrario al espiritu de colaboración en busca del bien común, más bien satisface a un pequeño grupo de personas con la mentalidad esclavista del Sglo XIX. En la equivalencia fantástica de moda por estos días, los diputados del PRI y del PAN que aprueban esta reforma estarían en la lista de Abraham Lincoln en su modalidad de cazador de vampiros.
Eso y no otra cosa significa legalizar el salario mínimo de 7 pesos por hora trabajada.
Esta vez no es una lucha de clases pues los universitarios con las colegiaturas más altas están conscientes de que la reforma laboral propuesta por Felipe Calderón y alabada por Enrique Peña Nieto y sus corifeos en el PRI y el PAN están concientes de que se busca el empobrecimiento de la sociedad.
No son solo los analistas de izquierda quienes se dan cuenta de esta incongruencia, sino los estudiosos del mercado como lo vemos en estos artículos que Paradigma ha seleccionado para servicio de sus lectores.
Al final podemos ver un artículo de Terra donde podemos observar que en México los salarios mínimos son inferiores a los de China, Venezuela, Perú, Argentina e inmensamente más reducidos que los de Noruega.
Por: Elie Smilovitz / Twiiter: @smilovitz
La Reforma es todo lo contrario al espiritu de colaboración en busca del bien común, más bien satisface a un pequeño grupo de personas con la mentalidad esclavista del Sglo XIX. En la equivalencia fantástica de moda por estos días, los diputados del PRI y del PAN que aprueban esta reforma estarían en la lista de Abraham Lincoln en su modalidad de cazador de vampiros.
Eso y no otra cosa significa legalizar el salario mínimo de 7 pesos por hora trabajada.
Esta vez no es una lucha de clases pues los universitarios con las colegiaturas más altas están conscientes de que la reforma laboral propuesta por Felipe Calderón y alabada por Enrique Peña Nieto y sus corifeos en el PRI y el PAN están concientes de que se busca el empobrecimiento de la sociedad.
No son solo los analistas de izquierda quienes se dan cuenta de esta incongruencia, sino los estudiosos del mercado como lo vemos en estos artículos que Paradigma ha seleccionado para servicio de sus lectores.
Al final podemos ver un artículo de Terra donde podemos observar que en México los salarios mínimos son inferiores a los de China, Venezuela, Perú, Argentina e inmensamente más reducidos que los de Noruega.
La reforma laboral y el modelo liberal
Enrique Bautista Villegas
El análisis y dictamen en la Cámara de Diputados de la Iniciativa de Ley con carácter de preferente que el presidente Felipe Calderón enviara a finales de agosto al Congreso de la Unión en materia de reformas a la Ley Federal del Trabajo, estuvo acompañado de movilizaciones de protesta por parte de organizaciones de trabajadores, estudiantes, o simplemente miembros de la sociedad civil, inconformes con el contenido y las intenciones de la propuesta presidencial.
Una vez aprobado el dictamen en la Cámara de Diputados, con la oposición de los representantes elegidos, y designados, a través de los llamados partidos de izquierda, y el voto a favor de los integrantes del PRI el PAN y sus comparsas del PVEM y de Nueva Alianza, ahora la protesta se mueve al Senado de la República.
Mientras eso sucede, la mayoría de los medios de información (sic), escritos y electrónicos aplauden el avance logrado, que dicen: servirá para darle competitividad al país, atraer más inversión y generar más empleo. Acompañan su ejercicio informativo (sic) de análisis simplistas, en los que presentan a los integrantes de la flamante 62 Legislatura que aprobaron el dictamen de referencia como: comprometidos con el futuro del país, responsables, y consecuentes, con la función que les fue asignada por la sociedad. A los que se opusieron al dictamen, y a los que lo rechazaron en las calles, los condenan con adjetivos como: revoltosos, irresponsables, enemigos de la democracia y otros similares.
La realidad es que lo que se debate en el Congreso, y está en juego con la aprobación de las reformas laborales a discusión, es la disyuntiva entre rechazar o seguir fortaleciendo un modelo de desarrollo contrario a los intereses de las grandes mayorías del país y que favorece los intereses de los grupos económicos más poderosos, así como en grado menor los de los medianos empresarios, a quienes de manera natural les atrae la idea de mantener las relaciones con sus trabajadores a su arbitrio (¿a quién le dan pan que llore? No en balde no ha salido a celebrar el dictamen ningún dirigente sindical; ni siquiera los tristemente célebres Joaquín Gamboa Patrón, Carlos Romero Deschamps o la maestra Elba Esther Gordillo, y si han salido a celebrarlo además del presidente Calderón, aunque señalándolo como insuficiente, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, y los dirigentes de prácticamente todas las cúpulas empresariales.
No se trata aquí de señalar en detalle los retrocesos que la iniciativa presidencial propone introducir a la legislación laboral; eso lo han venido haciendo en diversos foros y algunos medios especialistas en la materia.
Baste decir que la introducción de conceptos como la contratación a prueba, para labores discontinuas, la subcontratación por horas (outsorcing) son contrarios a los intereses de los trabajadores y quitan además al patrón la responsabilidad solidaria para con el trabajador que la actual Ley Federal del Trabajo contiene. Por otro lado, la iniciativa y el dictamen aprobado por los diputados desaparece el salario mínimo diario, ya que permite que éste se pueda pagar de manera proporcional al tiempo de trabajo desempeñado con la base del salario mínimo por hora, actualmente de 7.47 pesos; elimina el sábado y/o domingo como días de descanso obligatorios, en función de las necesidades de trabajo de la empresa, sin que éste confiera el derecho al pago de la jornada doble o una prima extra. Además, deja intocado el control corporativo de los dirigentes sindicales, debilita a los sindicatos a partir de la introducción del derecho a la subcontratación, alarga los juicios laborales al dividir la primera audiencia en dos partes y momentos diferentes: una para buscar la conciliación y mediación y otra para la presentación de pruebas, reduce el pago de los salarios caídos a un periodo de un año aun cuando los juicios obrero-patronales se alarguen más allá de ese tiempo, es discriminatoria en contra de los y las trabajadoras domésticas porque no obliga al patrón a avisar por escrito sobre la recisión de contrato, entre otras medidas regresivas.
Si los trabajadores y la sociedad en general permiten que la reforma laboral sea aprobada en los términos señalados, se estará dando un duro golpe no sólo para la clase trabajadora en activo, sino también para aquellos que buscan empleo, incluidos los jóvenes que aún no llegan a la edad laboral, ya que los mecanismos de “flexibilización” para la contratación contribuirán al abaratamiento de su trabajo a partir de la legalización del regateo en la oferta de empleos.
La pretendida reforma laboral, al igual que las demás unilateralmente designadas como “reformas estructurales” por los ideólogos del modelo económico neoliberal, lo que en realidad pretenden es la adecuación del marco jurídico y las políticas públicas en el país, a las pretensiones de los organismos financieros internacionales y sus aliados en todas las economías mundiales; reformas todas ellas que son contrarias a los intereses de la mayor parte de la sociedad, y a un desarrollo más justo y equitativo.
La única manera de contrarrestar la imposición de las “reformas estructurales” es a través de una sociedad organizada, con estrategias de presión colectivas e inteligentes, más que escandalosas, ruidosas y de llamarada de petate.
En buena medida, las protestas de los trabajadores, estudiantes y de la sociedad civil organizada, que se han venido incrementando en Grecia, España, y ahora Francia, responden a las mismas variables que hemos padecido en México a partir de la década de los 80. Aprendamos de la rápida reacción de las organizaciones sociales en las democracias europeas y del sentido de solidaridad desarrollado en esas naciones.
ALTO NIVEL
El análisis y dictamen en la Cámara de Diputados de la Iniciativa de Ley con carácter de preferente que el presidente Felipe Calderón enviara a finales de agosto al Congreso de la Unión en materia de reformas a la Ley Federal del Trabajo, estuvo acompañado de movilizaciones de protesta por parte de organizaciones de trabajadores, estudiantes, o simplemente miembros de la sociedad civil, inconformes con el contenido y las intenciones de la propuesta presidencial.
Una vez aprobado el dictamen en la Cámara de Diputados, con la oposición de los representantes elegidos, y designados, a través de los llamados partidos de izquierda, y el voto a favor de los integrantes del PRI el PAN y sus comparsas del PVEM y de Nueva Alianza, ahora la protesta se mueve al Senado de la República.
Mientras eso sucede, la mayoría de los medios de información (sic), escritos y electrónicos aplauden el avance logrado, que dicen: servirá para darle competitividad al país, atraer más inversión y generar más empleo. Acompañan su ejercicio informativo (sic) de análisis simplistas, en los que presentan a los integrantes de la flamante 62 Legislatura que aprobaron el dictamen de referencia como: comprometidos con el futuro del país, responsables, y consecuentes, con la función que les fue asignada por la sociedad. A los que se opusieron al dictamen, y a los que lo rechazaron en las calles, los condenan con adjetivos como: revoltosos, irresponsables, enemigos de la democracia y otros similares.
La realidad es que lo que se debate en el Congreso, y está en juego con la aprobación de las reformas laborales a discusión, es la disyuntiva entre rechazar o seguir fortaleciendo un modelo de desarrollo contrario a los intereses de las grandes mayorías del país y que favorece los intereses de los grupos económicos más poderosos, así como en grado menor los de los medianos empresarios, a quienes de manera natural les atrae la idea de mantener las relaciones con sus trabajadores a su arbitrio (¿a quién le dan pan que llore? No en balde no ha salido a celebrar el dictamen ningún dirigente sindical; ni siquiera los tristemente célebres Joaquín Gamboa Patrón, Carlos Romero Deschamps o la maestra Elba Esther Gordillo, y si han salido a celebrarlo además del presidente Calderón, aunque señalándolo como insuficiente, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, y los dirigentes de prácticamente todas las cúpulas empresariales.
No se trata aquí de señalar en detalle los retrocesos que la iniciativa presidencial propone introducir a la legislación laboral; eso lo han venido haciendo en diversos foros y algunos medios especialistas en la materia.
Baste decir que la introducción de conceptos como la contratación a prueba, para labores discontinuas, la subcontratación por horas (outsorcing) son contrarios a los intereses de los trabajadores y quitan además al patrón la responsabilidad solidaria para con el trabajador que la actual Ley Federal del Trabajo contiene. Por otro lado, la iniciativa y el dictamen aprobado por los diputados desaparece el salario mínimo diario, ya que permite que éste se pueda pagar de manera proporcional al tiempo de trabajo desempeñado con la base del salario mínimo por hora, actualmente de 7.47 pesos; elimina el sábado y/o domingo como días de descanso obligatorios, en función de las necesidades de trabajo de la empresa, sin que éste confiera el derecho al pago de la jornada doble o una prima extra. Además, deja intocado el control corporativo de los dirigentes sindicales, debilita a los sindicatos a partir de la introducción del derecho a la subcontratación, alarga los juicios laborales al dividir la primera audiencia en dos partes y momentos diferentes: una para buscar la conciliación y mediación y otra para la presentación de pruebas, reduce el pago de los salarios caídos a un periodo de un año aun cuando los juicios obrero-patronales se alarguen más allá de ese tiempo, es discriminatoria en contra de los y las trabajadoras domésticas porque no obliga al patrón a avisar por escrito sobre la recisión de contrato, entre otras medidas regresivas.
Si los trabajadores y la sociedad en general permiten que la reforma laboral sea aprobada en los términos señalados, se estará dando un duro golpe no sólo para la clase trabajadora en activo, sino también para aquellos que buscan empleo, incluidos los jóvenes que aún no llegan a la edad laboral, ya que los mecanismos de “flexibilización” para la contratación contribuirán al abaratamiento de su trabajo a partir de la legalización del regateo en la oferta de empleos.
La pretendida reforma laboral, al igual que las demás unilateralmente designadas como “reformas estructurales” por los ideólogos del modelo económico neoliberal, lo que en realidad pretenden es la adecuación del marco jurídico y las políticas públicas en el país, a las pretensiones de los organismos financieros internacionales y sus aliados en todas las economías mundiales; reformas todas ellas que son contrarias a los intereses de la mayor parte de la sociedad, y a un desarrollo más justo y equitativo.
La única manera de contrarrestar la imposición de las “reformas estructurales” es a través de una sociedad organizada, con estrategias de presión colectivas e inteligentes, más que escandalosas, ruidosas y de llamarada de petate.
En buena medida, las protestas de los trabajadores, estudiantes y de la sociedad civil organizada, que se han venido incrementando en Grecia, España, y ahora Francia, responden a las mismas variables que hemos padecido en México a partir de la década de los 80. Aprendamos de la rápida reacción de las organizaciones sociales en las democracias europeas y del sentido de solidaridad desarrollado en esas naciones.
ALTO NIVEL
La reforma laboral disminuirá los ingresos: expertos
Analistas opinan que medio millón de personas se sumarán al segmento de pobreza por ingresos, además hay temas que los legisladores dejaron en el aire.
La Cámara de Diputados aprobó varios cambios a la Ley a finales de septiembre.
Por: Elie Smilovitz / Twiiter: @smilovitz
Publicado: 03 de Octubre de 2012
Twitter: @altonivel
La reforma a la Ley Federal del Trabajo, aprobada por la Cámara de Diputados a finales del mes de septiembre no satisfizo las expectativas de algunos de los analistas y expertos en materia económica. Para el Dr. José Luis de la Cruz, autor del estudio ‘2012: Los retos de México ante el cambio de Gobierno’, la iniciativa de reforma deja varias cuestiones en el aire.
Asimismo, el texto tipifica como delito el trabajo de menores de 14 años fuera del círculo familiar.
Establece que las empresas podrán contratar a nuevos empelados en “modo de prueba” antes de elaborar un contrato fijo o permanente e introduce, por primera vez, el permiso de paternidad.
“El marco jurídico ha quedado rebasado por las circunstancias demográficas y sociales, la legislación no contribuye a incentivar la competitividad de las empresas y seguimos teniendo prácticas sindicales poco transparentes”, afirma el Dr. De la Cruz. Asimismo, el académico critica que el texto de la reforma laboral aprobado en el Congreso de los Diputados omita establecer sanciones contra la actividad informal y las prácticas de competencia desleal, y señala que hacen falta incentivos para que los empresarios aumenten salarios.
"La reforma laboral está íntimamente ligada a la fiscal. Uno de los puntos más importantes desde el punto de vista fiscal es abaratar los costos de contratación de los empleados. Porque los salarios no son deducibles a efectos del IETU y esto está siendo muy gravoso para los empleadores”, explica Luis Carbajo, experto en práctica fiscal de Baker & Mc Kenzie.
“Creo que uno de los aspectos que esta reforma deja sin resolver es el desarrollo de sectores y regiones, que, al ser diferentes requieren incentivos especiales”, afirma De la Cruz.
Según el análisis del De la Cruz, tras la aprobación de la reforma el ingreso de los trabajadores caerá 10%, gracias a la flexibilización de los despidos, los contratos por obra, cuya consecuencia inmediata será una reducción de los contratos fijos con prestaciones de Ley. El investigador estima que medio millón de personas se sumarán al segmento de pobreza por ingresos, gracias a la reforma de la Ley Federal del Trabajo.
Cuando sólo 250 empresas generan el 20% del valor agregado en México, en un parque de más de cinco millones de empresas y casi 45 millones de trabajadores, la situación laboral tanto para empleadores como para trabajadores se topa con varios obstáculos.
Entre 2007 y 2012, se registraron menos de 16 mil nuevos empleadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es decir, ese segmento creció a tasas inferiores del 1.5% anual.
"Los empresarios necesitan tener incentivos fiscales para cumplir con sus obligaciones y ayudar a generar una cultura de legalidad, que es algo que falta en México y explica que la base de contribuyentes sea tan escasa", señala Carbajo.
La tasa de desocupaciónpromedio se ubicó en 4.6% entre 2006 y 2012, pero se mantuvo por encima del 5% a partir de 2009, según INEGI. En comparación con algunos países en Europa, la cifra se parece a la de Alemania (5.2%) y Holanda (4.9%), que tienen tasas de desempleo bajas en relación a España (24%) o Portugal (14.8). El bloque del euro en su conjunto promedia un desempleo del 10.2% en 2012. Mientras que en Estados Unidos, la cifra alcanzó el 8.1% en agosto.
22 mil 630 pesos es lo que ingresa cada al año un trabajador que gana el salario mínimo y 6.7 millones de mexicanos se encuentran en esa situación, mientras que tres millones 100 mil trabajadores no perciben ingreso alguno por su trabajo, según INEGI.
Además, los trabajadores en la economía informal aumentaron más rápido y en mayor cantidad que aquellos registrados por el IMSS. Los primeros pasaron de 11 millones y medio en 2007 a 14 millones 216 mil en 2012, según la Secretaría de Trabajo y Previsión Social.
En los últimos cinco años el desempleo creció 54%, los trabajadores con empleos precarios aumentaron en 43%, quienes trabajan sin contratoescrito se incrementaron en 17% y aquellos que sólo ganan el salario mínimo aumentaron 20%, según INEGI. En Nuevo León casi se duplicó la cantidad de gente que se empobrece a pesar de tener trabajo, mientras que en el D.F.este segmento creció 62% entre 2006 a 2012.
Todo lo anterior desembocó en una pérdida del 24% de la capacidad adquisitiva per cápita, si tomamos como referencia los precios de la canasta básica y las cifras del Consejo de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Y representa un desafío que debe atajar la reforma laboral.
Salario mínimo mexicano, por debajo del de naciones emergentes más importantes
02 de Octubre de 2012 • 07:35hs • actualizado 07:52hs
El Banco Mundial señala que contar con salarios mínimos también pueden causar
una pauperización entre la población más vulnerable
Foto: Reforma
Ciudad de México.- El salario mínimo en México ubica al país en la posición 55 entre 125 economías en la lista de pagos mínimos, en la que el primer sitio es el más bajo, indicó el Banco Mundial.
El ingreso que recibe un trabajador mexicano que está en el punto más bajo de la escala de pagos está tasado en mil 332 dólares anuales, medido en dólares de 2005, según esta edición del informe "Empleos", del Reporte de Desarrollo Mundial de este año que emite el organismo internacional.
Destaca que si se compara al País entre otras naciones de América Latina, el ingreso mexicano es superior al de Nicaragua, que es de mil 308 dólares; el de Bolivia, de 960 dólares, o El Salvador, de 936 dólares.
Sin embargo, el salario mínimo en casi todos los otros países latinoamericanos es más alto.
El de Argentina, por ejemplo, es de 4 mil 824 dólares; en Brasil es de 3 mil dólares; el de Perú, con 2 mil 4 dólares, o Venezuela, con 3 mil 504 dólares anuales.
De igual manera, el salario en México está por debajo del registrado en las naciones emergentes más importantes, .
En China, el ingreso mínimo anual es de mil 728 dólares, mientras que en Rusia es de 3 mil 816 dólares.
India sí se ubica por debajo del País, con un ingreso de 264 dólares.
El país con el salario mínimo más bajo es Burundi, ubicado en África Oriental, con un monto de 36 dólares al año; mientras que Noruega es la nación con el total más alto con un sueldo mínimo de 45 mil 500 dólares anuales.
El Banco Mundial señala que contar con salarios mínimos puede tener ventajas para los trabajadores, en el sentido que pueden generar certidumbre para eliminar las formas más precarias de empleo y evitar distorsiones en el mercado laboral, pero también pueden causar una pauperización entre la población más vulnerable.
"Tener al menos a un miembro de la familia trabajando en el sector formal permite que las familias mexicanas puedan acceder a una fuente regular de ingreso, cobertura de salud y a través de esto ingresar a la red de apoyos de seguridad social", indica el reporte.
Pide Banco Mundial a gobiernos que creen empleos
El mundo necesitará 600 millones de empleos más para mantener las actuales tasas laborales estables en los próximos 15 años, explicó este lunes un informe del Banco Mundial.
Por lo anterior, el organismo pidió a los gobiernos que faciliten la tarea al sector privado para crear trabajo.
"El desafío en el segmento juvenil es por sí solo impactante. Más de 620 millones de jóvenes no trabajan ni estudian. Solo para mantener las tasas laborales estables, la cantidad de empleos a nivel mundial tendría que aumentar en unos 600 millones durante los próximos 15 años", explicó el Informe sobre Desarrollo Mundial que publica anualmente el Banco.
Divulgado días antes de la asamblea anual del BM en Tokio, el informe destacó que la lucha para superar la pobreza pasa por poner un pie en el mercado laboral, en especial para las mujeres.
"Es fundamental que los gobiernos trabajen bien con el sector privado, el cual da cuenta del 90% de todos los puestos de trabajo", sostuvo el presidente del Banco, Jim Yong Kim.
La reforma a la Ley Federal del Trabajo, aprobada por la Cámara de Diputados a finales del mes de septiembre no satisfizo las expectativas de algunos de los analistas y expertos en materia económica. Para el Dr. José Luis de la Cruz, autor del estudio ‘2012: Los retos de México ante el cambio de Gobierno’, la iniciativa de reforma deja varias cuestiones en el aire.
Puntos clave de la reforma
El texto aprobado por los diputados regulará la subcontratación de personal o outsourcing y los contratos por prestación de servicios que a partir de ahora deberán constar por escrito.Asimismo, el texto tipifica como delito el trabajo de menores de 14 años fuera del círculo familiar.
Establece que las empresas podrán contratar a nuevos empelados en “modo de prueba” antes de elaborar un contrato fijo o permanente e introduce, por primera vez, el permiso de paternidad.
“El marco jurídico ha quedado rebasado por las circunstancias demográficas y sociales, la legislación no contribuye a incentivar la competitividad de las empresas y seguimos teniendo prácticas sindicales poco transparentes”, afirma el Dr. De la Cruz. Asimismo, el académico critica que el texto de la reforma laboral aprobado en el Congreso de los Diputados omita establecer sanciones contra la actividad informal y las prácticas de competencia desleal, y señala que hacen falta incentivos para que los empresarios aumenten salarios.
"La reforma laboral está íntimamente ligada a la fiscal. Uno de los puntos más importantes desde el punto de vista fiscal es abaratar los costos de contratación de los empleados. Porque los salarios no son deducibles a efectos del IETU y esto está siendo muy gravoso para los empleadores”, explica Luis Carbajo, experto en práctica fiscal de Baker & Mc Kenzie.
“Creo que uno de los aspectos que esta reforma deja sin resolver es el desarrollo de sectores y regiones, que, al ser diferentes requieren incentivos especiales”, afirma De la Cruz.
Según el análisis del De la Cruz, tras la aprobación de la reforma el ingreso de los trabajadores caerá 10%, gracias a la flexibilización de los despidos, los contratos por obra, cuya consecuencia inmediata será una reducción de los contratos fijos con prestaciones de Ley. El investigador estima que medio millón de personas se sumarán al segmento de pobreza por ingresos, gracias a la reforma de la Ley Federal del Trabajo.
Contexto internacional
Las lagunas del mercado laboral nacional y el difícil contexto internacional han contribuido a crear una situación complicada en materia de empleo.Cuando sólo 250 empresas generan el 20% del valor agregado en México, en un parque de más de cinco millones de empresas y casi 45 millones de trabajadores, la situación laboral tanto para empleadores como para trabajadores se topa con varios obstáculos.
Entre 2007 y 2012, se registraron menos de 16 mil nuevos empleadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es decir, ese segmento creció a tasas inferiores del 1.5% anual.
"Los empresarios necesitan tener incentivos fiscales para cumplir con sus obligaciones y ayudar a generar una cultura de legalidad, que es algo que falta en México y explica que la base de contribuyentes sea tan escasa", señala Carbajo.
La tasa de desocupaciónpromedio se ubicó en 4.6% entre 2006 y 2012, pero se mantuvo por encima del 5% a partir de 2009, según INEGI. En comparación con algunos países en Europa, la cifra se parece a la de Alemania (5.2%) y Holanda (4.9%), que tienen tasas de desempleo bajas en relación a España (24%) o Portugal (14.8). El bloque del euro en su conjunto promedia un desempleo del 10.2% en 2012. Mientras que en Estados Unidos, la cifra alcanzó el 8.1% en agosto.
¿Y los salarios?
Sin embargo, de una Población Económicamente Activa (PEA) total de cerca de 45 millones de personas, que crece en un millón de nuevos trabajadores cada año, 37 millones ganan cinco salarios mínimos o menos, mientras que 28.5 millones percibe tres salarios mínimos o menos, según datos del INEGI.22 mil 630 pesos es lo que ingresa cada al año un trabajador que gana el salario mínimo y 6.7 millones de mexicanos se encuentran en esa situación, mientras que tres millones 100 mil trabajadores no perciben ingreso alguno por su trabajo, según INEGI.
Además, los trabajadores en la economía informal aumentaron más rápido y en mayor cantidad que aquellos registrados por el IMSS. Los primeros pasaron de 11 millones y medio en 2007 a 14 millones 216 mil en 2012, según la Secretaría de Trabajo y Previsión Social.
En los últimos cinco años el desempleo creció 54%, los trabajadores con empleos precarios aumentaron en 43%, quienes trabajan sin contratoescrito se incrementaron en 17% y aquellos que sólo ganan el salario mínimo aumentaron 20%, según INEGI. En Nuevo León casi se duplicó la cantidad de gente que se empobrece a pesar de tener trabajo, mientras que en el D.F.este segmento creció 62% entre 2006 a 2012.
Todo lo anterior desembocó en una pérdida del 24% de la capacidad adquisitiva per cápita, si tomamos como referencia los precios de la canasta básica y las cifras del Consejo de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Y representa un desafío que debe atajar la reforma laboral.
Salario mínimo mexicano, por debajo del de naciones emergentes más importantes
02 de Octubre de 2012 • 07:35hs • actualizado 07:52hs
El Banco Mundial señala que contar con salarios mínimos también pueden causar
una pauperización entre la población más vulnerableFoto: Reforma
Ciudad de México.- El salario mínimo en México ubica al país en la posición 55 entre 125 economías en la lista de pagos mínimos, en la que el primer sitio es el más bajo, indicó el Banco Mundial.
El ingreso que recibe un trabajador mexicano que está en el punto más bajo de la escala de pagos está tasado en mil 332 dólares anuales, medido en dólares de 2005, según esta edición del informe "Empleos", del Reporte de Desarrollo Mundial de este año que emite el organismo internacional.
Destaca que si se compara al País entre otras naciones de América Latina, el ingreso mexicano es superior al de Nicaragua, que es de mil 308 dólares; el de Bolivia, de 960 dólares, o El Salvador, de 936 dólares.
Sin embargo, el salario mínimo en casi todos los otros países latinoamericanos es más alto.
El de Argentina, por ejemplo, es de 4 mil 824 dólares; en Brasil es de 3 mil dólares; el de Perú, con 2 mil 4 dólares, o Venezuela, con 3 mil 504 dólares anuales.
De igual manera, el salario en México está por debajo del registrado en las naciones emergentes más importantes, .
En China, el ingreso mínimo anual es de mil 728 dólares, mientras que en Rusia es de 3 mil 816 dólares.
India sí se ubica por debajo del País, con un ingreso de 264 dólares.
El país con el salario mínimo más bajo es Burundi, ubicado en África Oriental, con un monto de 36 dólares al año; mientras que Noruega es la nación con el total más alto con un sueldo mínimo de 45 mil 500 dólares anuales.
El Banco Mundial señala que contar con salarios mínimos puede tener ventajas para los trabajadores, en el sentido que pueden generar certidumbre para eliminar las formas más precarias de empleo y evitar distorsiones en el mercado laboral, pero también pueden causar una pauperización entre la población más vulnerable.
"Tener al menos a un miembro de la familia trabajando en el sector formal permite que las familias mexicanas puedan acceder a una fuente regular de ingreso, cobertura de salud y a través de esto ingresar a la red de apoyos de seguridad social", indica el reporte.
Pide Banco Mundial a gobiernos que creen empleos
El mundo necesitará 600 millones de empleos más para mantener las actuales tasas laborales estables en los próximos 15 años, explicó este lunes un informe del Banco Mundial.
Por lo anterior, el organismo pidió a los gobiernos que faciliten la tarea al sector privado para crear trabajo.
"El desafío en el segmento juvenil es por sí solo impactante. Más de 620 millones de jóvenes no trabajan ni estudian. Solo para mantener las tasas laborales estables, la cantidad de empleos a nivel mundial tendría que aumentar en unos 600 millones durante los próximos 15 años", explicó el Informe sobre Desarrollo Mundial que publica anualmente el Banco.
Divulgado días antes de la asamblea anual del BM en Tokio, el informe destacó que la lucha para superar la pobreza pasa por poner un pie en el mercado laboral, en especial para las mujeres.
"Es fundamental que los gobiernos trabajen bien con el sector privado, el cual da cuenta del 90% de todos los puestos de trabajo", sostuvo el presidente del Banco, Jim Yong Kim.
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